9 de cada 10 empresas dejan de existir tras tres años de operación en Latinoamérica, sin duda alguna un dato que alarma sobre el camino emprendedor y la manera en la que los emprendedores creamos y tomamos decisiones en las compañías sin un proceso de planificación claro o dejando de lado las métricas para saber el estadío de la empresa.
Aunque pueden ser muchos los factores involucrados en esta estadística, a través de mi experiencia he podido identificar 4 de los más importantes o que se repiten con mucha frecuencia en todos los casos.
📍 No tener una estrategia y objetivos claros para todos los colaboradores
La única forma de poder conseguir objetivos desafiantes es que exijan al máximo a nuestros equipos. No solo tenemos que estar preocupados por lo que haga la competencia que conocemos, sino porque competimos con el mundo.
Descubrí que la mejor forma de competir, de ser eficiente, de ser parte de una empresa inteligente, es que el equipo esté totalmente alineado en la visión y empoderado en la ejecución. Después de muchos golpes aprendí que es a través del equipo, no de uno mismo.
Uno puede ser inteligente, estar formado y tener experiencia, pero es muy poco si ese uno no se asocia con el equipo clave. Creo que es preferible ser parte de un propósito que pueda llevarse a cabo con un equipo que lo impulse, que ser el único dueño de una idea que no pueda implementarse o que no crezca.
📍 Falta de Compromiso de los colaboradores
La culpa no la tienen los empleados, sino las cabezas de la empresa por sostener estructuras de liderazgo demasiado rígidas y tradicionales donde se hace lo que el jefe dice, la información no es transparente, etc.
📍 Falta de equipo
Los intereses de los colaboradores y los socios están contrapuestos por definición. El jefe quiere que trabajen más horas por menos dinero y los empleados quieren lo opuesto, ¿no? La falta de confianza hace que no sea posible delegar con facilidad y el dueño de la empresa quiere aprender / saber de todo y las empresas tienen muchas trabas para alcanzar su máximo potencial.
📍 No poner foco en la Tracción y Crecimiento
Este es un problema grave en las Start-ups que anteponen la búsqueda de inversión antes que la generación de tracción.
Existen 20 canales de crecimiento. En esta etapa tenemos que seleccionar los canales principales y secundarios, para llevar adelante la mayor cantidad de experimentos posibles en todos ellos. El gran objetivo es aprender sobre lo que el mercado necesita.
Al menos se debería pensar en una idea por experimento por canal. Es importante no saltear esta etapa y sumar al equipo que va a llevar adelante los experimentos para que sientan mayor compromiso con los mismos. Luego se ejecutan los experimentos y se analizan para detectar cuales son los canales que logran mayor tracción.
Es importante remarcar que el objetivo no es acertar lo máximo posible, sino aprender lo que más se pueda, tanto de aciertos como de testeos que no funcionaron. En términos de inversión, deberían ser experimentos baratos y de relativo corto alcance para poder dar paso a experimentos en otros canales.
Abrazo emprendedor
Diego Noriega